El viajero ha hecho unos grandes
descubrimientos durante un paseo vespertino por el mismo centro de Madrid,
incluso por el kilómetro 0 de las carreteras españolas, en la Puerta del Sol.
Iba a la Posada del Peine, el hotel
más antiguo de Madrid, que se fundó en el año 1610, en la calle Postas, a un
paso de la Plaza Mayor, cerca de la Casa de Postas donde acudían muchas
personas por ser el lugar a donde llegaba el Correo Real, carruajes y
diligencias llenas de viajeros. Hoy es un hotel de la cadena Petit Palace, desde
2002, según me dijo su propietaria la mexicana Silvia Ramírez, quien tuvo a
bien enseñarme una habitación de los tres edificios que componen el actual y
moderno hotel de cuatro estrellas, conservándose en la recepción las maderas
originales donde llegaban los carruajes y se ataban los caballos. Se llama
Posada del Peine porque en 1610 lo fundó Juan Posada y tuvo la originalidad de
colocar un peine en cada habitación claro que bien atado para que los clientes
lo usaran y no se lo llevaran. Un detalle curioso más: Este hotel tiene su
propio fantasma, una mujer vestida de negro que fue vista por un huésped y en
otra ocasión por una camarera. www.petitpalaceposadadelpeine.com
.
Otra sorpresa fue enviar desde el
kilómetro 0 de las carreteras radiales de España, en la Puerta del Sol, una
singular foto a mi amiga hondureña Tania Zelaya, antigua alumna mía en
Periodismo Turístico en la Universidad Complutense y ahora asesora de la
presidencia de su país en el campo de la Marca País, invitándome a un encuentro
sobre este tema hace años en Tegucigalpa. El próximo mes de septiembre espero
verla en Pamplona donde seremos ponentes en el Congreso Internacional de Turismo
Religioso y Sustentable, que se celebra por primera vez en Europa y que, aunque
nació en Brasil ha pasado, además, por Argentina, Bolivia y Honduras.
Una segunda sorpresa fue encontrarme
en plena Puerta del Sol con el artista español vivo más reconocido en estos
momentos: El pintor Antonio López, a quien tuve el gusto de conocer hace muchos
años en una de sus visitas a Mallorca, y ahora rodeado de un numeroso grupo de
personas curiosas por saber lo que estaba pintando el maestro. Me acerqué. Le felicité
con un “Gracias, maestro”, y me
dedicó una sonrisa; hice unas fotografías a la llegada y, curiosamente, como
cuando terminé mi conversación con Silvia, aún seguía allí y a punto de
marcharse. Tomó el cuadro y se fue por una calle, un cuadro que será una obra
que permanecerá en la memoria histórica de la pintura española del siglo XXI.
Al día siguiente el periódico ABC del viernes6 de agosto, le dedicaba La Tercera,
escrita por Antonio Lara, quien decía del artista: “es tan colosal que aún somos incapaces de dimensionarlo con justeza”.
Y a los pocos metros, unos cubanos
que buscaban el apoyo de los españoles por una Cuba libre. En ese mismo periódico
del 6 de agosto, la corresponsal de ABC en Cuba, Camila Acosta, decía en su crónica
“Tras las protestas del 11 de junio, centenares de cubanos siguen detenidos o
desparecidos, entre ellos Daniel Ferrer García líder de la Unión Patriótica de
Cuba y presidente del Consejo para la Transición Democrática de Cuba. Desde entonces,
su familia no ha podido ni verlo ni hablar con él”. Claro y lo mismo le ocurrió
a esta periodista, que fue detenida sin cargo alguno por informar de lo cansado
que está el pueblo cubano de su régimen dictatorial. Y le hago una foto a un joven
con un cartel de “Cuba libre”. Le apoyo. Nunca me han gustado las dictaduras ni
de izquierdas, ni de derechas, como cuando estuve en 1979 en la Argentina de
Videla, que tuve que encerrarme en el Ayuntamiento de Buenos Aires con uno que
quería hablar conmigo de la pésima situación del país…Las dictaduras no son
buenas en ningún concepto. Y España que vive desde hace 40 años en democracia,
el menos malo de los sistemas políticos nos lo queremos cargar en nombre de no sé
qué falso progresismo.
Un paso más en el ámbito cultural
fue acercarme a la enorme librería de la FNAC, en la calle Preciados, y comprar
el libro “Hernán Cortés, una biografía
para el siglo XXI”, de mi amigo el
historiador sevillano, afincado en Extremadura, Esteban Mira Caballos, al que
invité hace muchos años a que participara en las jornadas históricas que
organicé sobre mi paisano Nicolás de Ovando, primer gobernador en la isla de la
Española y sustituto de Cristóbal Colón, al mando de los españoles en Indias.
En su biografía, de mucho éxito editorial y con aportaciones nuevas sobre el conquistador
del imperio azteca, quien fue ayudado por muchos otros pueblos indígenas del
actual México porque eran masacrados por los aztecas, Mira Caballos cita, hasta
doce veces, al brocense Nicolás de Ovando. La primera cuando Hernán Cortés quería
ir con él a Indias, pero se vio impedido por las heridas que le causó el marido
de una de sus amantes. También tengo el
honor de ser citado en la bibliografía con un trabajo que presenté en Trujillo en
los Coloquios Históricos de Extremadura en 1999 sobre “Donoso Cortés, marqués
de Valdegamas”. El propio Donoso decía ser descendiente del famoso Hernán
Cortés. http://chdetrujillo.com/donoso-cortes-marques-de-valdegamas/
Y antes de regresar a casa, tuve la gran
fortuna de ver la recién inaugurada estación del metro de Gran Vía, que ha
colocado el templete que diseño para esta famosa entrada el arquitecto Antonio
Palacios, autor de singulares edificios madrileños como el actual Ayuntamiento
de Madrid en la plaza de Cibeles o el Hospital de Jornaleros de Maudes, en la
calle de Raimundo Fernández Villaverde (donde viví mientras estudiaba en
Madrid) o la casa de las Cariátides, hoy Instituto Cervantes en la calle de
Alcalá. Y allí mismo hay une entrada al tren de cercanías, que para en la
Puerta del Sol y me llevó aquella tarde/noche hasta la estación de Chamartín,
dando fin a esa amplia jornada vespertina.
Pues sí querido amigo,aquí estoy por estos lares de Extremadura y he tenido la gran oportunidad de compartir la lectura siempre interesante de tu Paseo Vespertino por el centro de nuestro también querido Madrid. Gracias por tus ricos comentarios.
ResponderEliminarUn abrazo.
v.r.
Muchas gracias, Victor, pero añádeme tu apellido por favor.
ResponderEliminarDe Madrid al cielo
ResponderEliminarMuy interesante...y ameno
ResponderEliminarSaludos de Esteban