Dicen que recordar es volver a vivir. Y esto es lo que estoy haciendo estos días en que todo los españoles nos hallamos enclaustrados por culpa de ese mal llamado coronavirus
En estos días en los que estamos
todos – o al menos la mayoría- de los españoles confinados, sirve para poner en
orden algunas cosas, entre ellos, los recuerdos de un viajero, un viajero que hizo
su primer viaje en avión de Aviaco desde Bilbao a Madrid el 27 de septiembre de 1975 (Día
Mundial del Turismo) tras regresar de realizar mis terceras prácticas de
periodismo, en esta ocasión en la agencia EFE.
Posteriormente, ya a los pocos años mi
primer viaje al extranjero, cuando ya vivía en Mallorca fue a un lugar tan
lejano como Caracas (octubre de 1979) y pasé todo el mes en Venezuela,
Argentina y Brasil, con magníficos recuerdos de estas cuatro semanas. ¡Comí
tanta carne en ese viaje que, al regresar a Mallorca, lo primero que me hice
fue un par de huevos fritos!
He regresado a Venezuela dos veces
más, una de ellas pateé la selva de Canaima, cercana a la catarata más alta del
mundo: Salto Ángel, de 979 metros de caída libre. Dejo aquí dos enlaces:
Uno
de mi blog sobre este singular viaje. https://pacorivero.blogspot.com/2011/10/el-salto-angel-un-regalo-de-dios.html
Y el otro un precioso video, con 11
millones de visualizaciones, sobre la catarata del Salto Ángel, de 360 grados.
Toca con ratón y dale la vuelta: https://youtu.be/L_tqK4eqelA
Y a Brasil he vuelto otras tres
veces (Florianópolis, al sur y Natal, al norte), y por última vez, el año pasado,
visitando las bellísimas cataratas de Iguazú desde el lado brasileño. En la ocasión
anterior, en 1979, lo hice desde el lado argentino.
Después he ido viajando por otros
lugares del mundo, tan curiosos, como Crimea, cuando era un territorio de
Ucrania y pisé el palacio de Livadia, donde se reunieron. poco antes de
terminar la II Guerra Mundial, Stalin, Churchill y Roosevelt, el presidente de
Estados Unidos; y cerca de allí, el Líbano, tras la guerra civil, con la
preciosa ciudad romana de Baalbeck o la Taiwán española, con el castillo de
Santo Domingo
La portuguesa Macao es el único
lugar de China donde está autorizado el juego y ha logrado desbancar a Las
Vegas en este singular campo de la economía, aunque ha estado cerrada por el
coronavirus.
Pero ahora se da la circunstancia de
que mi amiga Concha Pelayo, una escritora zamorana, con la que también estuve
en un viaje que organicé por Chipre, para ver, entre otras cosas, el nacimiento
del mar de la diosa Afrodita (Venus para los romanos)
Pues bien, Concha me envía unas
fotos de nuestro común viaje a Lituania, allá por mayo de 2008. Un país báltico,
que he tenido la serte de recorrer un par de veces con mi amigo lituano Rai,
que huy mismo (27 de marzo de 2020) me dice desde Cuba, que es donde está confinado,
que espera regresar pronto a España…
De Lituania recuerdo muchas cosas, pero
especialmente tres: La visita al castillo de Trakai, la antigua capital lituana;
la casa de verano del Premio Nobel de Literatura, el alemán Tomas Mann, y el
viaje en avioneta polaca de la II Guerra Mundial por los cielos del país… Todos
bellísimos recuerdos de los 50 países que he visitado.
Aventura
en avioneta: https://pacorivero.blogspot.com/2009/05/por-kaunas-y-birstona.html
Un
viaje explicado: https://pacorivero.blogspot.com/2018/12/mi-conferencia-sobre-lituania-el-19-de.html
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