Hacia Egipto
Escribo
esta crónica viajera a bordo mismo del avión que me traslada el 26 de abril de
2017 desde Madrid a El Cairo, ciudad que visito por quinta o sexta vez. Sin
duda, la civilización faraónica tiene un gran atractivo para mí, tanto que en
su día tenia firmado un contrato con una prestigiosa editorial madrileña para
escribir una guía turística de este atractivo e interesante país, y que no vio
la luz, porque la editorial dejó de publicar libros dedicados al sector
turístico. No cejo en el empeño.
En
pleno vuelo me ofrecen un ejemplar del periódico “The Egyptian Gacette”, que es
el diario más antiguo de oriente medio que se publica en inglés. El tema de
portada y de su editorial es la visita que mañana viernes piensa hacer el Papa
Francisco a Egipto, como hombre de paz, tratando estos temas con el actual
presidente del país, el general Sisi, el Patriarca Ortodoxo de Alejandría, el
papa Alejandro II y con el muftí de Egipto, la máxima autoridad religiosa del
país de los faraones. El editorial recalca el encuentro como un deseo de paz
tras los desastrosos atentados contra los cristianos coptos hace unos días en
el que murieron 36 personas. (El 10 % de la población egipcia es cristiana
copta). De hecho, el 24 de abril fue la celebración del evangelista San Marcos,
evangelizador de Egipto.
Libros
de España y de mi tierra extremeña se hallan en la Biblioteca de Alejandría, prestigiosa
entidad que he tenido la oportunidad de visitar en dos ocasiones, siempre por
sugerencia e invitación de mi amigo Hamdi Zaki, que fuera durante años director
de la Oficina de Turismo de Egipto para España y Portugal, y también en los
Estados Unidos, y que ha pronunciado conferencias sobre Egipto por toda
España, incluido en Navalmoral de la Mata y recientemente en el Hogar Extremeño
de Madrid, de la Gran Vía, del que uno tiene el honor de ser su vicepresidente.
Hamdi es buen amigo que programa ahora una magna exposición sobre los Tesoros
de Tutankamon en Extremadura, bajo los auspicios del Gobierno regional.
Es
triste que unos cuantos desalmados, por no sé qué locos pensamientos, decidan
cometer asesinatos en masa, hundiendo la economía del país de los faraones. Lo
dice bien claro el último párrafo del editorial de La Gaceta Egipcia: “Líderes
como estos (que durante estos días se reúnen en el Cairo) son la esperanza para
la coexistencia en lugar de propagar los sueños de la guerra que promueven
grupos fanáticos”